*Un proyecto plantea la elaboración de botanas de segunda generación ricas en antioxidantes y fibras de tipo dietario, libres de grasas saturadas, lo que ayudará a controlar niveles de glucosa en sangre, triglicéridos y colesterol
Pachuca, Hgo.- Con el propósito de reforzar la infraestructura del Área Académica de Química en Alimentos de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), Carlos Alberto Gómez Aldapa, profesor-investigador de esta área, dirige el proyecto “Fortalecimiento de las líneas innovadoras de investigación aplicada al desarrollo tecnológico del área de biotecnología y alimentos del estado de Hidalgo”, que surge como respuesta a las necesidades planteadas por el Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Hidalgo (COCyTEH) en el área de Biotecnología y Alimentos. En él participan también la Universidad Politécnica de Francisco I. Madero y la Universidad Politécnica de Pachuca.
El concepto de biotecnología define a los procesos en los que se aplica la tecnología para transformar e incrementar la producción o usar algún microorganismo para modificar un alimento y producir sustancias que no se originan de manera natural. Su aplicación tiene creciente importancia en la economía nacional e internacional, en sectores como el farmacéutico, la agricultura, el procesamiento y estabilización de alimentos, la remediación de suelos y aguas y la generación de productos químicos especializados para la generación de polímeros, sabores y fragancias.
La biotecnología Alimentaria es uno de los temas más relevantes en este momento. Actualmente, Hidalgo no es autosuficiente en la producción de alimentos; aunque aquí se produce la materia prima para otros estados, ésta no es transformada, y por ello se importa la gran parte de los alimentos. Este proyecto plantea que, a través de la incubadora de empresas de la UAEH, se desarrollen alternativas para transformar los productos e incrementar su valor agregado, precisó Gómez Aldapa.
Este trabajo, con un financiamiento del Fondo Mixto (FOMIX) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT), también propone aprovechar la producción de cebada en el estado de Hidalgo, toda vez que con los residuos de los granos se producirán fertilizantes orgánicos y subproductos para el consumo humano. Además de esto, se sugiere la elaboración de botanas de segunda generación ricas en antioxidantes y fibras de tipo dietario, libres de grasas saturadas con las cuales, en conjunto con un tratamiento farmacológico adecuado, ayudará a las personas a controlar sus niveles de glucosa en sangre, triglicéridos y colesterol, disminuyendo el impacto negativo de su dieta.
Respecto al consumo de alimentos transgénicos, Gómez Aldapa reveló que su ingesta no daña al organismo humano y asegura que hay modificaciones genéticas que hacen que la planta exprese la producción de una proteína, pero que ni ésta ni su manipulación genética traen consecuencias negativas, puesto que el producto final no contiene residuos; además, los alimentos transgénicos son regulados por las instancias correspondientes de sanidad vegetal antes de liberar ese tipo de materiales en el país.
